Vecinos afirman que ya se ha derrumbado una parte del muro que aún protege sus predios. Denuncian que no reciben apoyo de la comuna de Chorrillos.
Las olas revientan como avisando el peligro que se avecina muy cerca del lugar, mientras Juan Manuel del Solar señala la rajadura del piso del remozado malecón de la playa La Herradura, en Chorrillos. Los minutos transcurren y el mar no deja de advertir el peligro... y a su paso golpea los pedazos de concreto que quedan de un sector del malecón que aún protege las bases del edificio Las Gaviotas.
Juan Manuel del Solar es presidente de la junta de vecinos de dicho edificio. Preocupado denuncia que desde hace seis días no atienden el pedido de las 36 familias que habitan en Las Gaviotas, ya que tanto "el citado muro como la infraestructura de sus viviendas están a punto de colapsar".
"El municipio de Chorrillos no hace nada por nosotros, por más que hemos advertido del peligro que corremos desde hace un año. Somos 108 personas que vivimos acá", refiere.
Los residentes de Las Gaviotas mencionan que, como producto de la erosión y el fuerte oleaje, las estructuras del edificio se están debilitando. Y esto se debe a que un sector del malecón ha colapsado con notoriedad en estos días.
Uno de los pasadizos del malecón, inaugurado en diciembre del 2011 por la Municipalidad de Lima, luce con rajaduras. La situación se agrava aún más al notar que el agua empieza a filtrarse por el interior del malecón provocando un forado en falso debajo del paso peatonal. "Las olas están pegando fuerte al malecón y ya está penetrando hasta llegar a las bases del edificio", agrega del Solar, preocupado.
PERO, ¿QUÉ ES LO QUE ESTÁ PASANDO REALMENTE EN EL LUGAR?
El urbanista Augusto Ortiz de Zevallos aclara que este sector del malecón fue construido hace tres décadas para que sirva como división entre la playa y la superficie de La Herradura. "Ahora el muro soporta el fuerte oleaje porque el mar ha ganado espacio", precisa.
Según el especialista, este problema (como el del arenado) empezó a comienzos de los 80, cuando el entonces alcalde de Chorrillos, Pablo Gutiérrez, empezó la construcción de un túnel a la playa La Chira, dinamitando las rocas del acantilado ubicadas al pie del Morro Solar. Fue así que estas piedras cayeron sobre la playa submarina de arena que había de forma natural y la destrozaron, impidiendo que la arena ingrese más a La Herradura. "Este hecho rompió con el equilibrio del mar, que ahora tiene un oleaje fuerte", explica.
Por eso, Ortiz de Zevallos sugiere que se necesita ejecutar una solución sostenible en el lugar. "Incluso se debe pensar en retirar esa gran roca que provoca estos problemas".
EMAPE RESPONDE
Ante el peligro de que colapse el malecón y el citado edificio, el gerente general de Emape, Iván Infanzón, respondió que se reunirán este lunes con los dueños de los inmuebles para encontrar una solución técnica. "Los cimientos de Las Gaviotas se han deteriorado. Por lo tanto, es importante que la parte inferior del malecón sea debidamente resguardada. Eso sí, los trabajos se harán de manera rápida y segura", añade.
Al respecto, la comuna de Lima resalta que el cuidado, mantenimiento y resguardo de las obras de La Herradura es responsabilidad de Chorrillos.
Mientras tanto, los vecinos han comprado bolsas de cemento y arena para defenderse de las fuertes olas que rompen cerca de sus viviendas.
TENSIÓN ENTRE LIMA Y CHORRILLOS
Una queja muy común de los vecinos de Las Gaviotas es la tensión que viven los municipios de Lima y Chorrillos que aún no se ponen de acuerdo en la administración de la playa de La Herradura. "Eso nos perjudica mucho", señalaron, molestos.
Pero esta relación complicada entre ambas comunas ya tiene antecedentes. A los pocos meses de inaugurarse el malecón de La Herradura, el municipio de Lima responsabilizó a Chorrillos de la ausencia de serenos en el concurrido balneario.
Actualmente, la otrora discoteca la Máquina del Sabor es un punto negro en el remozado malecón. Esto a causa de que Lima y Chorrillos no se ponen de acuerdo para su rehabilitación.
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